"Yume no intenta contarnos historias, es una suerte de ejercicio cinematográfico de digresiones, cuyas sensaciones son generadas quizá casualmente en los silencios del autor". (Héctor Sanz)
Pecado
Ella dice: "Pero a veces no somos responsables". Él se ha dado cuenta y decide enfrentarlo como mejor sabe, mirándola a los ojos contesta: "Para eso existe la culpa y su pago". Ella no se inmuta y tomándolo de la mano se acerca diciendo: "Pero hay pecados de por vida". Él besa su mano, alza y acerca el rostro hasta detenerse junto a su oído, sonriendo, le susurra, "Para eso está la muerte".
Caminan tomados de la mano, el frío los une más; ella inclina la cabeza apoyándola en el hombro de su amado.
Luces de Hoteles se prenden en desorden.
Uno, Dos, Tres
El frío viento acaricia sus pómulos, mientras se adentra más en ese puente imaginado que hoy por fin se ha hecho realidad. Puede oír el río y ver las luces que titilan en el infinito de esta pequeña ciudad que habita, ese sueño / capricho que disfruta al caminar.
Se detiene, observa su sueño, mira alrededor suyo: la belleza impregnada de retazos y recuerdos; se acerca a la baranda de metal, el viento le invita a volar, se acerca más y extiende los brazos, besará ese vacío. La gravedad lo invita y acepta.
Una hoja cae al río uniéndose a la basura que lo navega.
Ruhuan Huarca Lamoca (Arequipa, 1988) Egresado de Derecho, estudiante de Psicología y Literatura en la UNSA. Es miembro del grupo Aletheya y activo promotor cultural. Los textos pertenecen a su primer libro de relatos titulado Yume (Aletheya Editores, Arequipa, 2010).
Comentarios
Publicar un comentario