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MICRORRELATOS V


"[...] Alejado de lo pedestre, se sume en el relato breve para revelarnos los planos más extremos del pensamiento humano y, enrostrarnos, de una buena vez, que no todo ha sido dicho y que seguimos siendo los mismos forasteros de siempre. [...]". (Víctor Salazar)

PARADOJA

Le propuso matrimonio. Ella no aceptó. Y vivieron felices para siempre.

LA SUERTE Y LA MUERTE

El combatiente, al final de la batalla, fue un cadáver con suerte: de todos los disparos que recibió, uno lo mató.

ESPEJISMO

Eran hermosas criaturas de largos cabellos ondulados como las olas del mar. Sus rostros eran luminosos como la luna y sus senos redondos y duros cual guijarros maduros. Al menos así las imaginó cuando oía mejor sus cantos. Fue conmovedora su sorpresa cuando las únicas sirenas que oyó al salir de su inconsciencia fue al momento que le cerraron los ojos y le taparon la boca. El reloj se detuvo, pero el tiempo aún marchaba en su cabeza. Ahora sólo esperaba oír los sollozos, pero todo estaba en silencio.
       -¡Dios mío, qué solos se quedan los muertos!- se dijo.

LÍMITES

Era el espejo donde siempre se miraba y al mirarse siempre se reflejaba. Era el somnífero que cada noche tomaba por los ojos. No tenía el juicio para pensar una idea por sí mismo; todo lo repetía como se lo decía su mesías, su dios, su maestro: el televisor.

EL ETERNO RETORNO

Cuando a Van Gogh se le deslizó el dedo en el gatillo, el disparo que le perforó el pecho siguió las reglas de la causalidad en una visión lineal del tiempo. A Hemingway el mismo disparo acababa de volarle las entrañas. Hay un principio del tiempo y un fin, y fue precisamente el mismo disparo lo que le causó el mismo final a Kurt Cobain. Ahora que he comprendido que los mismos acontecimientos se repiten en el mismo orden, tal cual ocurrieron, sin ninguna posibilidad de variación, sé que entre el cañón de mi revólver y mi sien no hay nada personal.

(De: Viaje al fin de la nada)

Pedro Olórtegui Huamaní (Ayacucho, 1981) Dirige la revista literaria El cabaret ambulante. Ha publicado el poemario La morfología del tiempo (Cascahuesos Editores, Arequipa, 2012) y el libro de minificción Viaje al fin de la nada (Cascahuesos Editores, arequipa, 2014). Su realidad es más grande que su historia, está llena de secretos y de olvidos; de catástrofes que quedan más allá de la vida misma. Hoy se dedica a amar completamente a su hija y a esperar a que el infinito se deje tocar algún día. 

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